Bring Your Own Device (BYOD) es una política empresarial según la cual se permite a los empleados usar sus propios dispositivos personales para trabajar. Esta práctica que está aumentando con la pandemia no está exenta de riesgos. Y es que los ciberataques llegan hasta los rincones más insospechados, como acabamos de ver con el ataque masivo a la Administración de Estados Unidos, con brechas de seguridad en Defensa, Comercio y Energía, aunque haya sido a través del software de gestión de redes de SolarWinds, Orión.
La práctica del BYOD no es nueva, pero con la pandemia se ha vuelto a poner de moda. No se trata sólo de que los trabajadores puedan usar sus dispositivos portátiles personales (ordenadores, smartphones, tabletas) para trabajar, sino que también incluye que los lleven a su empresa para conectarse a la red y a los recursos corporativos.
Entre las ventajas del BYOD podemos citar la flexibilidad en el trabajo de cada empleado, el incremento de la productividad, puesto que los trabajadores se encuentran más cómodos usando sus propios dispositivos o que permite a las empresas ahorrar costes en la adquisición de tecnología. Pero ¡atención BYOD!: esta práctica no está exenta de riesgos.
¡Atención BYOD! Vector de entrada: el móvil de empresa
Ha llegado el turno de los inconvenientes de esta práctica. El más destacado, ya lo habréis adivinado, es el riesgo que supone para la seguridad de la red corporativa. Le siguen el no tener protegida la información confidencial de la empresa o que si el smartphone particular de un trabajador está infectado y se conecta a la red de la empresa se puede infectar toda la red. Por no hablar de lo que puede ocurrir si al trabajador en cuestión le roban su móvil.
Trabajar con el smartphone es, en sí mismo, un peligro. Cada vez se utilizan más para trabajar, se comparten con los empleados (¡sí, ya se, tener dos móviles es un rollo!, pero…) y normalmente se usan también fuera de la seguridad que supone el recinto de la empresa y por lo tanto fuera de las políticas de seguridad que ésta ha podido implementar. Además de todo esto hay que tener en cuenta que muchas empresas están faltas de MDM’s (gestión de datos maestros).
Por todo ello, ¡atención BYOD!, estas son algunas de las negligencias más comunes que los expertos de TECNOideas 2.0 han encontrado en las auditorías que hemos realizado:
• Instalación de aplicaciones no recomendadas. Como por ejemplo mensajería, redes sociales, aplicaciones de dating, etc.
• Aplicaciones de descarga 2P2 (Peer to Peer), que permiten al usuario descargarse un software que conecta su ordenador con el resto de personas que estén en la red.
• Patrones o contraseñas de desbloqueo sencillos o sin patrón alguno.
• Falta de cifrado.
• Uso compartido con otros familiares, normalmente las hijas o los hijos.
• Conexiones a redes abiertas o inseguras.
• Conexiones a dispositivos inseguros (bluetooth).
Las principales causas de estos incidentes son Malwares (softwares maliciosos), Ramsonwares (programa de software malicioso), Data Leaks (fuga de información expuesta y publicada) y DLP (Prevención de pérdida de datos).
Si estáis interesados en tener más información sobre este tema, os recomendamos la lectura de una entrevista a Oriol Cremades, Doctor en Derecho que publicó la web Do Better, el hub de contenidos digitales de Esade.
Servicio “SmartAudit” de TECNOideas 2.0
Pero todas estas amenazas, que son reales, tienen una solución: la prevención. El refranero es sabio y en la ciberseguridad se puede aplicar perfectamente el popular refrán que dice “más vale prevenir”. Y es absolutamente cierto.
En TECNOideas 2.0 ofrecemos el servicio “SmartAudit”, con el cual proporcionamos a las empresas un informe detallado de cada uno de los dispositivos, así como las preceptivas recomendaciones de seguridad.
Y por supuesto acompañamos a las empresas en todo el proceso de implantación segura del BYOD.
Somos consultores de seguridad
«La ciberseguridad no es un gasto, es una inversión»