Aunque os parezca increíble eso todavía está pasando. Fotocopias de WhatsApp o de cualquier otra aplicación de mensajería instantánea. Capturas de pantallas de móviles. O documentos word en los que se ha pegado uno o varios correos electrónicos. Ya es hora de que sepáis que eso no tiene ninguna validez jurídica. Ya es hora que conozcáis bien el trabajo de los forenses digitales, porque ¿todavía vais a un juicio con fotocopias del WhatsApp?
El trabajo de los forenses digitales es uno de los más importantes en la era digital actual. Sin embargo sigue siendo una labor callada, poco conocida y escasamente reconocida y remunerada.
Y eso a pesar de que cada vez son más numerosos los requerimientos relacionados con los temas digitales. Podemos citar despidos laborales, espionaje industrial, problemas matrimoniales, de parejas y familiares, acoso de cualquier tipo (sexual, escolar, laboral…), herencias, enfrentamientos varios…
Naturalmente, también siguen la pista de los ciberdelincuentes que amenazan, estafan o adquieren de forma fraudulenta datos de particulares, empresas o entidades de todo tipo.
La importancia de los forenses digitales
En la era digital actual, la mayoría de las actividades diarias se hacen en línea o mediante dispositivos electrónicos. Nos cuesta muy poco escribir un correo electrónico o en redes sociales. Especialmente en las redes, solemos escribir rápidamente, sin pensar demasiado y movidos por la inmediatez de responder ante cualquier provocación. Esto significa que los delitos también se cometen en línea y los datos digitales pueden ser utilizados como evidencia en investigaciones criminales. Por esta razón, los forenses digitales son esenciales para la prevención y resolución de delitos en el mundo actual.
Los forenses digitales son expertos en recuperación de datos y análisis forense de sistemas y dispositivos electrónicos. Con ello ayudan a investigar y recopilar pruebas digitales de dispositivos electrónicos y redes informáticas. Así determinan la causa de incidentes de seguridad, identificar a los responsables de delitos cibernéticos y proporcionar pruebas en procedimientos legales.
Todos estos datos recuperados no pueden aportarse sin más, en un papel. Deben seguir una rigurosa extracción y custodia hasta el momento del juicio.
Aquí es donde la importancia de los forenses digitales adquiere su máxima razón de ser: la capacidad para recopilar y analizar datos digitales que son críticos en la prevención y resolución de delitos cibernéticos.
No hace falta recordaros que los ciberdelincuentes pueden cometer una amplia gama de delitos, desde el robo de identidad y la piratería informática hasta la explotación de menores y el terrorismo.
En muchos casos, los delincuentes digitales intentarán ocultar su actividad mediante la eliminación de datos o el uso de herramientas para enmascarar su identidad.
Los forenses digitales tienen la habilidad de descubrir esta información y proporcionar pruebas concretas que pueden ayudar a la policía y a los fiscales en su investigación.
Además, los forenses digitales son esenciales en la protección de datos de empresas y organizaciones. Las empresas almacenan una gran cantidad de información confidencial en línea, como registros de empleados, registros financieros y datos de clientes. Si esta información se ve comprometida debido a un ciberataque, puede causar graves consecuencias financieras y legales para la empresa. Los forenses digitales pueden ayudar a prevenir estos ataques y, en el caso de que ocurran, pueden proporcionar pruebas para identificar a los responsables y ayudar a la empresa a tomar medidas para evitar futuros ataques.
Otra área en la que los forenses digitales son importantes es en la protección de menores. Los delincuentes cibernéticos a menudo buscan explotar a menores en línea. Los forenses digitales pueden ayudar a identificar a estos delincuentes y proporcionar pruebas para apoyar la investigación y el enjuiciamiento. Además, los forenses digitales pueden ayudar a los padres a proteger a sus hijos en línea al identificar y eliminar cualquier actividad sospechosa o peligrosa en los dispositivos electrónicos de sus hijos.
En conclusión, los forenses digitales son esenciales para la prevención y resolución de delitos cibernéticos en la era digital actual. Estos profesionales tienen la habilidad de recuperar y analizar datos digitales que pueden ser críticos en la identificación de delincuentes y la protección de empresas, organizaciones y menores.
Si bien los delitos cibernéticos continúan evolucionando, los forenses digitales siguen siendo una herramienta clave en la lucha contra la ciberdelincuencia y en la protección de nuestros datos digitales.
La importancia de estos profesionales queda de manifiesto si pensamos que las policías de todo el mundo poseen expertos en análisis forense digital. Incluso la Interpol ayuda a los países miembros de esta organización a optimizar el uso de las pruebas electrónicas.
TECNOideas posee forenses digitales, profesionales especializados en todo lo que acabamos de describir. Ya nos hemos ocupado de explicaros la importancia de estos temas con la entrevista a Fernando Mairata, presidente de la Asociación Profesional de Peritos de Nuevas Tecnologías (PETEC), que podéis leer AQUÍ en su primera parte, publicada en mayo de 2022. Una semana después publicamos la segunda parte. AQUÍ.
Es importante que las empresas sean conscientes de lo que pueden aportar, ya que los procesos judiciales se alargan mucho y no hay que pensar solo en la extracción de datos, sino también en la custodia de ellos durante todo el largo proceso hasta llegar a juicio. Hay una serie de formalidades para guardar estos datos que solo las empresas de ciberseguridad y los forenses acreditados pueden garantizar. Hay algunas entidades que se ocupan de estos temas, como la Asociación Europea de Investigadores Digitales Forenses (AEIDF). Otras agrupan a peritos judiciales informáticos, abogados tecnológicos y psicólogos, como la Asociación de Convivencia con las Nuevas Tecnologías.
