Desde que cambié definitivamente a Ubuntu para trabajar, tanto tareas generales como no sólo las «técnicas», una de las cosas que me alegraba el día a día era mi repositorio de imagenes, y el cambio automático en una de las pantallas que siempre uso. Pero eso era fácil, y en Windows. Había probado scripts, programas, trucos, pero no me funcionaba…